Frankenstein, Mary Shelley

Durante el verano de 1816, cuatro famosos escritores ingleses pasaron unos días juntos en una mansión de Ginebra: Lord Byron, John Polidori, Percy Bysshe Shelley y Mary Shelley. Allí, se retaron a escribir una historia de terror. Mar y fue la única que cumplió su promesa.
El joven Victor Frankenstein, ha tenido siempre una vida acomodada económicamente, desde su infancia pudo gozar de sus caprichos y estudios, y sus padres acordaron su matrimonio con su maravillosa prima Elisabeth, hecho con el que él estaba completamente de acuerdo.

El padre de Victor decide enviarle a estudiar medicina a la universidad de Inglostad, allí comienza a destacar académicamente por encima de sus compañeros,particularmente en anatomía, llegando a obsesionarse con la idea de crear vida humana.
Durante sus ratos libres comienza a estudiar a fondo esta posibilidad, y se resuelve a llevarla a cabo, llegando a cometer atrocidades tales como visitar cementerios durante la noche e incluso sustraer huesos u elementos útiles para su creación. 
Una noche, después de un arduo trabajo de dos años, consigue darle vida, siendo esta su primera impresión: “De pronto, a la luz pálida y amarillenta de la luna, que se abría paso entre las contraventanas, vi al desgraciado, al mounstruo miserable que había creado”, mostrando un desagrado absoluto. Ante dicha reacción huyó, abandonando así al monstruo a su suerte. 
Desde este momento, su creación comienza a intentar sobrevivir, sintiendo rechazo allá por donde pasa, debido al miedo que provoca con su aspecto, aunque sus intenciones son buenas, llegando a ser apaleado en numerosas ocasiones. 
En su reencuentro con Victor, intenta convencerle de la realización de un favor especial que pondría fin a sus penurias, pero este se niega.
Desde este momento, el monstruo cambia de mentalidad buscando la venganza. 
El transcurso de la historia es una fuerte crítica sobre la ética y moral científicas, ya que es el análisis de la evolución del comportamiento de una criatura creada y abandonada por su propio creador, sin haber hecho ningún daño hasta el momento. La tristeza y el desconocimiento que tiene el mounstruo sobre los fenómenos meteorológicos, el funcionamiento de la sociedad y su propio cuerpo, nos hace sentir compasión y preguntarnos hasta qué punto es lógica la evolución de sus acciones. 

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